El objetivo de una alimentación cetogénica es nutrir a las células sanas y debilitar a las células enfermas.
Esto es posible debido a que las células sanas pueden obtener la mayor parte de la energía que necesitan de las cetonas, o cuerpos cetónicos. Las cuales, como ya sabemos, son moléculas que el hígado elabora a partir de las grasas. En cambio, la mayoría de células enfermas no son capaces de hacerlo, pues el alimento preferido de éstas es la glucosa, seguido de las proteínas.
La poca glucosa que necesitan algunas células (como los glóbulos rojos, por ejemplo), se alimentan con la pequeña cantidad aportada por los alimentos permitidos y por la glucosa fabricada por el propio organismo. De esa manera estaríamos cubiertos.
LOS BENEFICIOS MÁS COMUNES
- Pérdida de peso
- Corrección de la Diabetes tipo 2
- Normalización de la presión arterial
- Reducción del acné
- Rendimiento deportivo aumentado
- Corrección de problemas digestivos
- Corrección y posible eliminación de SOP (síndrome de ovario poliquístico)
- Tratamiento complementario para el cáncer
- Tratamiento complementario para el Alzheimer
- Tratamiento complementario para diferentes enfermedades mentales.
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